Nuestra ruta número 6 nos ha traído de nuevo a la milenaria ciudad de Tarifa, tras esperar que la última levantera (suestá) nos diese cuartelillo, para realizar el itinerario denominado CERROS DEL ESTRECHO, un coqueto devenir de senderos y de antiguas pistas militares construidas por los presos de la guerra de España.
Iniciamos nuestra marcha en el punto de encuentro, el Aparcamiento Municipal Tarifa, una herramienta muy necesaria en la Tarifa turística de estos días que reutiliza parte de los terrenos expropiados tras la guerra para montar una instalación militar donde Infantería de Marina custodiaba una suerte de polvorines que encerraban los torpedos que las lanchas torpederas cedidas por Alemania estaban ubicadas en el Puerto de Tarifa. Los nuevos tiempos deben hacer revertir en los nuevos usos que necesita una sociedad del siglo XXI para su prosperidad y desarrollo. Por suerte, y gracias al esfuerzo de nuestros antecesores, la tensa Muralla Defensiva del Estrecho no tiene ya sentido.
Fuimos subiendo la margen derecha del río de Tarifa. La frondosidad tras un invierno de lluvias nos proporcionó un campo pletórico, levemente frío al inicio (9ºC) pero que con la aparición más vertical del sol se tradujo casi en una jornada de fresca primavera. Y es que Tarifa acoge al "turista climático" desde hace tiempo, siempre y cuando soporte las fuertes rachas incontrolables del aire acondicionado natural: levante y poniente.
Entre pequeñas cortijadas denominadas en la zona "LA COSTA" llegamos a la Galería Experimental de
Tarifa que SEGECSA
(Sociedad Española de Estudios para la comunicación fija a través del Estrecho
de Gibraltar S.A.) construyó en 1995, una simulación de túnel de 3,8 metros de
diámetro, 575 metros de longitud total, y un ligero desnivel del 1%. Forma
parte de los casi 50 años que llevan trabajando en el macroproyecto de conexión
fija entre los dos continentes en los que se han realizado investigaciones en
oceanografía, geología, obras experimentales y perforaciones en el mar. Los
primeros resultados quedaron plasmados en el primer anteproyecto primario del
túnel, presentado en 1996, en el que ya quedó descartada la opción del puente
por diferentes problemas.
Para volver a nuestro punto de encuentro nos desplazamos por una serie de senderos-pasadizos que nos llevaron a la "VIONDA", un grupo de casas frente a la Isla de Tarifa, cerca de la playa de La Caleta. Un lugar que aún hace perdurar aquellos alrededores de un pueblo cercado de huertas que con una economía local, luchando entre cañaverales contra el levante y el salitre, amortiguaba la dureza del territorio de frontera entre bailes comunales de chacarrá.
¡Pasamos una mañana estupenda!
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